martes, 4 de marzo de 2008

NINOS SIN PROBLEMAS

La Disciplina Positiva
© Roberta Maso-Fleischman, Ph.D.
Disciplina Positiva – Niños sin Problemas
La base de la disciplina positiva está en:
creer firmemente que todos en la familia son importantes
transmitirle a los hijos que Uds. los quieren y que ellos son muy importantes para Uds.
transmitirles que la familia funciona si todos colaboran
transmitirles que cada uno en la familia tiene responsabilidades y tareas que cumplir
y, por supuesto, mostrar respeto por los hijos
Durante la infancia los padres tienen que:
establecer una rutina diaria (lean el artículo No.5)
poner límites justos
proporcionarle a cada hijo su espacio personal
tener normas claras
en vez de utilizar el castigo, dejar que el niño sienta las consecuencias de sus acciones (lean los artículos No.7, 8 y 9)
en vez de utilizar las recompensas para premiar los trabajos cumplidos, motivar a los hijos a colaborar por el bien de la familia (lean el artículo No.10)
A medida de crecen los hijos los padres tienen que:
aprender a compartir su poder dentro de la familia y dejar que los niños muestren su iniciativa y opinen
promover una comunicación clara
escuchar a los hijos y analizar sus sugerencias (lean el artículo No.12)
Recuerden que:
El gran motor que facilita la conducta positiva de un niño es el QUERER PERTENECER a su familia.
Otros impulsores de una conducta positiva en el niño es el SENTIRSE QUERIDO y SENTIRSE TOMADO EN CUENTA por sus padres.
A medida que crece, el niño se da cuenta de qué cosas agradan a papá y a mamá y va querer agradarlos para sentirse querido y sentirse tomado en cuenta.
Por ejemplo:
Si el niño nace en una familia donde todos tienen responsabilidades definidas y el ser responsable es algo valioso para los padres, el niño se esmerará en ser responsable porqué de esta manera agradará a sus padres y se sentirá importante.
Si el niño nace en una familia donde es importante ser ordenado y respetar el espacio personal y las pertenencias de los otros, el niño se esmerará en ser ordenado y respetuoso de las cosas de sus hermanos y de sus padres, porqué de esta manera agradará a sus padres, se sentirá parte de la familia y valioso.
Lo arriba expuesto es un descripción del clima y del ambiente en el cual se da una DISCIPLINA POSITIVA.
Sin este ambiente no se puede dar una disciplina positiva.
Cuando el niño se siente tomado en cuenta, útil y valioso no tiene porqué recurrir a conductas negativas para llamar la atención o expresar su rabia.
El sentirse tomado en cuenta hace que los problemas de conducta desaparezcan.

GUIAS PARA LA DISCIPLINA POSITIVA

GUÍAS PARA LA DISCIPLINA POSITIVA
Del libro Disciplina Positiva por Jane Nelsen
Publicado por Ballantine, New York, NY: 1996


1.) Los niños de mala conducta son “niños desanimados” que tienen ideas erróneas de cómo lograr su meta principal de pertenecer. Estas ideas los guían al mal comportamiento. No podemos ser eficaces a menos que enfrentemos las creencias erróneas en vez de solamente el mal comportamiento.

2.) Use la animación para ayudar a los niños a sentir “que pertenecen” de tal manera que la motivación del mal comportamiento se elimine. Celebre cada paso en dirección a un mejoramiento de la situación en vez de enfocarse en los errores.

3.) Una muy buena forma de ayudar a que los niños se sientan animados es “pasar con ellos un tiempo especial.” Muchos maestros han notado un cambio dramático en un “niño problema” después de pasar cinco minutos simplemente charlando de lo que le gusta hacer al niño para entretenerse.

4.) Cuando acueste a los niños, pídales que compartan con usted el momento “más triste” y el momento “más feliz” del día. Después usted comparta con ellos. Se sorprenderá de lo que aprende.

5.) Tenga reuniones familiares o en la sala de clase para resolver los problemas con cooperación y respeto mutuo. Ésta es la clave para crear un ambiente de amor y respeto mientras ayuda a los niños a desarrollar la auto-disciplina, la responsabilidad, la cooperación y la capacidad de resolver problemas.

6.) Dé a los niños trabajos de importancia. Por conveniencia, muchos padres y maestros hacen cosas que los niños podrían hacer por sí mismos o ayudándose mutuamente. Los niños sienten que pertenecen cuando ellos saben que pueden aportar una contribución verdadera.

7.) Decidan juntos qué trabajos se necesitan hacer. Escríbalos y póngalos en una caja y deje que cada niño saque unos pocos cada semana; de esa forma nadie hace los mismos trabajos todo el tiempo. Los maestros pueden invitar a los niños a que les ayuden a establecer las reglas de la clase y hacer una lista en un cuadro titulado, “Nosotros decidimos:”. Los niños se sienten capaces, motivados y entusiasmados cuando se los incluye en las decisiones.

8.) Tome el tiempo para entrenar. Asegúrese que los niños comprenden lo que significa para usted “limpiar la cocina.” Para ellos puede que signifique poner los platos en el lavaplatos. Los padres y maestros podrían preguntar, “¿Cuál es tu entendimiento de lo que se esperaba?”

9.) Enseñe y modele el respeto mutuo. Una forma es siendo cariñoso y firme al mismo tiempo—cariñoso para mostrar respeto por el niño y firme para mostrar respeto por usted mismo y “las necesidades de la situación.” Esto es difícil durante un conflicto, así que use lo siguiente cuando pueda.

10.) El elegir el momento oportuno multiplicará por diez su eficacia. No “funciona” tratar de resolver un problema en el momento del conflicto—las emociones se cruzan en el camino. Enséñele a los niños que todos necesitamos un período para tranquilizarnos. Usted o los niños pueden ir a otro cuarto y hacer algo que los haga sentirse mejor—y después discutir el problema con respeto mutuo.

11.) Deje de lado la idea equivocada que dice que para hacer que los niños se comporten mejor, primero tienen que sentirse mal. ¿Quiere usted hacer mejor las cosas cuando se siente humillado? Esto representa una nueva perspectiva del “tiempo para tranquilizarse.”

12.) Use tiempo para tranquilizarse. Dígale a los niños por adelantado que todos necesitamos un “tiempo para tranquilizarnos” a veces cuando nos estamos comportando inapropiadamente, así, cuando se les pida que vayan a su cuarto para que pasen un tiempo allí, ellos pueden hacer algo que los haga sentirse mejor. “Cuando estés listo, vuelve y discutiremos juntos las soluciones.”

13.) El castigo puede “funcionar” si usted está interesado solamente en parar el mal comportamiento por “el momento.” A veces debemos tener cuidado de lo que funciona cuando los resultados a largo plazo son negativos—resentimiento, rebeldía, venganza o retraimiento.

14.) Enseñe a los niños que los errores son oportunidades maravillosas para aprender. Una forma de enseñar a los niños que los errores son oportunidades maravillosas para aprender es modelando usted mismo el uso de las “Tres R's de la Recuperación” después de haber cometido un error.
(1) Reconozca su error de buena gana;
(2) Reconcíliese. Esté dispuesto a decir “lo siento, no me gustó la forma como traté ese asunto;”
(3) Resuelva. Enfóquese en las soluciones en vez de la culpa. (#3 será eficaz solamente después de #1 y #2)

15.) Enfóquese en las soluciones en vez de las consecuencias. Muchos padres de familia y maestros intentan disfrazar el castigo llamándolo una consecuencia lógica. Invite a los niños a participar en la búsqueda de soluciones que
(1) están relacionadas,
(2) son respetuosas,
(3) son razonables y
(4) son útiles.

16.) Asegúrese de que se comunica un mensaje de amor y respeto. Empiece con “eres importante para mí. Estoy preocupado por esta situación. ¿Trabajarías conmigo para encontrar una solución?”

17.) ¡Diviértase! Lleve la alegría a los hogares y salas de clases.

lunes, 28 de enero de 2008

¿Qué es la Disciplina Positiva?

"Disciplina Positiva" es un programa que nace en los Estados Unidos, diseñado para enseñar a los niños y jóvenes a convertirse en miembros respetuosos, habilidosos y responsables en sus comunidades. Basado en el libro Best Seller "Positive Discipline", escrito por la Dra. Jane Nelsen, Lynn Lott, Cheryl Erwin, Kate Ortolano, Mary Hughes, Mike Brock, Lisa Larson y otros, enseña importantes habilidades sociales y de la vida de una manera profundamente respetuosa y alentadora tanto para los jóvenes como para los adultos (incluyendo padres, maestros, profesores, etc).

Estudios recientes nos dicen que los niños que tienen un sentido de conección con su comunidad, con su familia y con la escuela son menos propensos a comportarse mal. Para ser exitoso, colaboradores miembros de su comunidad, los niños deben aprender habilidades sociales y necesarias para la vida cotidiana. La Disciplina Positiva está basada en la noción que la disciplina debe ser enseñada y que la disciplina enseña.

Janes Nelsen ofrece los siguientes criterios de "Disciplina Positiva que ensena":
Los modelos de manejo de la Disciplina Positiva tanto para padres como para utilizarlos en la clase con los alumnos, estan pensados para desarrollar relaciones mutuamente respetuosas. LA Disciplina Positiva le ensena a los adultos a utilizar firmeza y amabilidad al mismo tiempo, y no intenta ser ni punitivo ni permisivo.
Las herramientas y conceptos de "Disciplina Positiva" incluyen:
-RESPETO MUTUO: Los adultos modelan la firmeza respetandose a ellos mismos y la necesidad de la sitacion, y modelan la amabilidad respetando las necesidades del nino.
IDENTIFICAR LA CREENCIA ATRAS DEL COMPORTAMIENTO: La disciplina positiva reconoce las razones por las cuales los ninos actuan de la manera que actuan y trabaja para cambiar esas creencias, antes que solamente intentar el cambio del comportamiento.
Comunicacion efectiva y habilidades para solucionar los problemas.
Disciplina que ensena (y no es ni permisiva ni punitiva).
Se focaliza en soluciones en vez de en castigos.
Motivar en vez de premiar. Motivar implica efuerzo y mejoramiento, no solo exito.